martes, 29 de septiembre de 2015

Trostrigo – Airealverso (2012)

       Una de las cosas que se ha puesto de moda en estos últimos años es hacer folk. Un género que comenzó más definido en sus términos, pero que con el correr del tiempo se ha ido combinando y ha estado coqueteando con otros tantos que finalmente, hoy en día, es difícil definir con exactitud tanto el alcance del concepto como qué artistas pueden ser incluidos dentro del mismo. En honor a la simplicidad, por tanto, entenderemos para los alcances del ejercicio que pueden catalogarse dentro de dicho género musical todos aquellos músicos que practiquen algún tipo de raíz folclórica de cualquier tipo. En tal caso, inseparable de su acústica de cuerdas de nylon y cuajada de pegatinas, TROSTRIGO, músico local oriundo de la ciudad de Rancagua y actualmente radicado en Argentina, puede incluirse en la lista. Sin embargo, tal como lo incierto y extendido del concepto de folk, también lo está el catálogo de músicos que de una u otra forma lo practican. Y ahí es donde es posible comenzar a separar el trigo de la simple maleza: si bien la música en esencia es simple, anclada principalmente a guitarra acústica y voz, eso no quiere decir que la simpleza sea garantía de un resultado apropiado. Visto desde el otro lado, si bien al folk se le han acoplado elementos del rock, el pop, el indie, sea lo que sea que signifique hoy en día eso, aquello no quiere decir que necesariamente dichos elementos aporten a la mezcla. En el caso de TROSTRIGO y este disco del año 2012, ambos supuestos son satisfechos de manera más que apropiada: su voz característica se funde de manera simbiótica con sus arpegios, y la riqueza de los arreglos musicales son un aporte de frescura y fuerza a sus sencillas pero efectivas canciones.

       La placa abre con “Genipsis”, una canción que marca la pauta de lo que será casi todo el disco: una combinación de acordes o un arpegio de guitarra al que comienzan a acoplarse otros instrumentos como percusión o teclados y que van haciendo crecer la canción hasta el clímax en el coro. Así también se da en piezas como “Tsunami”, “Disparos de Flecha” y la preciosa “Martina”. El disco fluye ágil y fresco, con los versos sutiles y elegantes, pero sin caer en cursilerías o provocaciones innecesarias, recurso al que algunos apelan y que puede ser legítimo, pero que muchas veces no obedece a reales propósitos artísticos y finalmente terminan en pirotecnia verbal o acrobacias lingüísticas que poco aportan. Nada de eso puede verse en “AIREALVERSO”, un disco que si bien enriquece la raíz folk presente en todas las canciones con elementos de cierta sensibilidad pop, se mantiene como un trabajo íntimo y cálido, algo que se agradece porque puede parecer simple, pero conseguir esa sensación de cercanía con el auditor no se consigue sólo rasgueando una guitarra. Se requiere algo más y TROSTRIGO lo tiene.

       Otra cosa que se agradece de la placa es que exuda un aire juguetón, casi infantil, que permea todas las canciones. Desde algunos versos, palmas de manos sonando, la forma de algunos arpegios o algunos particulares samples, como aquellos en “Curvas extranjeras” que a varios puede recordarles los días frente a la Nintendo, a lo largo de toda la extensión de “AIREALVERSO” se puede sentir que TROSTRIGO nunca perdió su espíritu de niño, esa capacidad de soñar, divagar, imaginar y jugar que a muchos, llegada la edad adulta, se les va secando y termina por hacérseles una costra para finalmente caérseles. Eso explica el gris de las grandes ciudades y la vida moderna y por eso es que escuchar un disco como “AIREALVERSO” a la vez gratifica y emociona. Y no es que el disco sea pura oda al amor o conceptos abstractos, porque desde esa misma trinchera de niño con su resortera, TROSTRIGO se encarga de dar un par de palos bien dados en la que se erige como una de los mejores cortes del disco como lo es “Doleser”, una canción más cercana al pop, con un ritmo para seguir con la cabeza y donde con frases tan brillantes como simples se burla de lo adulto, lo que ha de considerarse correcto según nos dicen, aquello a lo que tenemos que aspirar, con muestras como “Normal temer al que siente/Normal que crezcan miserias al frente/Alimentarse de muerte/Normal igualar objeto a mujeres”. Simple, preciso y directo.

       Actualmente TROSTRIGO tiene siete discos publicados, entre discos larga duración y EPs, y ha logrado mostrar su trabajo en distintas plataformas tanto en Argentina como en Chile. Desde su primer disco, que data del 2009, venía ya puliendo la fórmula de su folk con tintes de otros géneros aunque es en este disco, “AIREALVERSO” donde la fórmula logra cuajar de manera íntegra. De ahí en adelante, todo fue para mejor. Una invitación a disfrutar tanto sus trabajos más antiguos como su más nuevo material.

1 comentario:

  1. Podrias poner los links a los discos, algunos estan en youtube completo (sea pq el autor decidio compartirlo o pq alguien lo subio)... tb esta portal disc donde se puede escuchar algo del material... saludos!

    ResponderBorrar